UN VIUDO DE VALLADOLID

 

               Ha muerto Don Miguel Delibes Setién, viudo temprano de doña Ángeles de Castro. Su imagen, no vista con la frecuencia debida, aparecía de tarde en tarde en algún telediario. Mis ojos me llevaban de forma ineludible a sus manos. La izquierda, desde hace muchos años, lucía doblemente anillado el anular y el meñique. El primero portaba su anillo de boda y en el pequeño el de su añorada mujer.

            En cierta ocasión le  preguntaron algo que todo periodista demanda de los triunfadores que viven en “provincias”, sabida la frase sobre la necesidad de irse a la capital a guardar cola para intentar lograrlo.

            Por alusiones, sentimentales por supuesto, siempre me impresionó la contestación que dio a la pregunta: ¿por qué no se fue a Madrid?. “La vida me dejó pronto sin Ángeles, mi mujer, si, además, me dejan sin mi “El Norte de Castilla”, sin mi Real Valladolid, Club de Fútbol y sin mis perdices…¡usted me dirá!”.

            No es cuestión de mérito ni de colgarle medallas al sentimiento. Éste se tiene o no. Siempre habrá personas a las que el corazón les bombeará de distinta forma que a Don Miguel.

            Los políticos, señorías sin sentimientos, inventaron el grupo mixto para dar cobijo a esos seres que nacen sin la penosa virtud de la lealtad.

 

Nota del Autor: No todos los aficionados al fútbol son animales de bellota. Vaya una ligera muestra de cultos futboleros: Camus, Vargas Llosa, Alberti, Vázquez Montalbán y el recién extinto Delibes…¿sigo?

.

SE BUSCA CHICO

 

         Las películas, estadounidenses por supuesto, que empiezan con un  primer plano en donde una mano descuelga un cartel que pone: “Se busca chico”,  me gustan de una forma especial, porque suelen ser el comienzo de la biografía, o historia contada, de un vencedor.

         Al protagonista, el chico, sólo le preguntan el nombre y de inmediato lo ponen a trabajar.

         Haga usted esto en la Almunia de Santa Godina, por poner un ejemplo facilito, y se le cae el pelo incluido el que sale donde no tiene que salir. Esto se me ha ocurrido tras leer algo que ha dicho alguien de un organismo que no me cae especialmente bien: la CEOE

         Veo a mucho parado, autóctono o inmigrante, cumpliendo su denominación de origen, o sea parado, y pidiendo ayuda en la puerta de un establecimiento en el que has de estar bastante tiempo esperando que te atiendan, tal es la falta de personal para tanto público.

         No crean que yo apoyo los contratos basura y el libre despido sino que abogo porque a las buenas gentes que contratan circunstancialmente, para sacar a alguien de un apuro, incluso inventándose una tarea subsidiaria en su empresa, no se les caiga el pelo, incluso el que sale donde no tiene que salir, ante una inspección de trabajo.

         ¿Saben que pasa?. Que trabajo hay de sobra lo que no hay son “colocaciones”, que es algo totalmente diferente

.

DE CÓMO SE CACHONDEAN, ESPECIALMENTE, DE LOS VIEJOS

 

                         Cuando surge un cambio drástico, supongamos que hablamos de la imposición testicular de la peseta por el euro (nadie ha explicado, todavía debidamente,  el por qué)  distintas cadenas televisivas envían a sus becarios (obviamente jóvenes) a preguntar  a jubilatas y viejas amas de casa, cómo se las arreglan.

                        Los entrevistadores se mueren de risa y hacen reír a los tristes espectadores de telediarios, que son los propios entrevistados, con las respuestas. Contestaciones faltas de preparación de estos `pobres ancianos que, para mayor dolor, se creen protagonistas y enfatizan su incultura. Lo mismo pasa con Internet.

                        Durante estos días el culmen está  en la TDT.  Los vejetes se superan dejándote, encima, un regusto amargo cuando confiesan que su única distracción y tarea es ver permanentemente los programas de televisión:

                   -¿Y ahora que jago yo sin el aparatico ese que necesito?

                        Amar es admirar y si de siempre las relaciones adolescentes han tendido a la pérdida de esta admiración hacia la figura paterna, ahora el desdoro es mayor, incluso de padres/madres que rebasan muy poco los sesenta años.

                        Hasta hace poco el padre o la madre eran los primeros en ayudar al hijo para que rellenase su primer cheque, el que lo acompañaba para hacer una transferencia bancaria, incluso los que les ponían por primera vez los dedos sobre el teclado del iniciático ordenador.

                        Ahora los viejos no saben nada, son juguetes rotos motivo de mofa y escarnio de hijos y nietos. Se pasan todo el día preguntando, como tontos, cómo han de hacer las cosas. Y los tontos no son admirados y sin admirar no se puede amar.

N. del A.: Al día de hoy se han vendido 28.000.000 adaptadores para ver la TDT a 31,50 euros la unidad. ¿Qué es de esa ingente cantidad de dinero¿?

.

NIÑO, TEN CUIDADO

 

                            -¿De qué?. La educación, con su hermana menor la urbanidad, es una castración, pero, también, el único sistema hasta ahora inventado, para que no nos matemos con más frecuencia.

                            Mafalda va corriendo, alocada y sin saberlo, hacia un precipicio cuando oye el grito de su madre que dice: “¡Cuidado!”. La genial pequeña se vuelve, asustada,  y pregunta: “¿Se rompe?”

                            Educar es difícil porque como en el juego de la siete y media, bien nos pasamos o nos quedamos cortos. Una exagerada educación crea represión y la represión es miedo y el miedo es malo. Sólo el insalvable (guerras o terremotos) tiene la compensación de la solidaridad cuando se comparte, porque sólo, algunos, somos capaces de vencerlo en aras de otro.

                            Si, como todo, nos lo tragamos en solitario nuestro miedo interior nos produce incomprensión y odio. El valiente solitario es un loco. Solo el que se supera y vence al miedo es el auténtico valeroso, pero para eso ha de estar acompañado incluso, para siempre, algo utópico, de los que lo educaron.

                            También podríamos crear un mundo feliz en el que todos viviésemos a nuestro aire sin normas ni decretos. Sería un mundo de  locos felices.

                            Pero la ley de la gravedad existencial nos obliga a estar pegados a la tierra y codearnos con el prójimo y ante esto sólo queda crear un cinturón mental con nuestro auténtico “próximo”. Mi gente.

.

APLAUSOS

 

 

         La vieja viuda, aun viviendo sola hasta hace poco, ha sido autosuficiente y resolutiva Sus hijos, incluidos los políticos, la visitaban con frecuencia y todo marchaba sobre ruedas. Hace unos días un pequeño accidente doméstico, ¡ay los años!, la ha dejado desvalida.

         Ayer hubo una reunión familiar a la que asistieron los dos hijos acompañados de sus parejas. María, su hija, dice que no puede hacerse cargo de ella y Pepe, su marido, aplaude el razonamiento de su mujer.

         Manolo se excita y replica alegando que tampoco él puede hacerlo y Carmen, la nuera, jalea visceralmente su postura.

         Se recriminan, se agravian entre ellos, hasta llegar a la ofensa personal y al insulto. Mientras, la vieja madre sufre postrada en la cama de un Hospital de la Seguridad Social.

         Cambio a plano político. Sale un diputado azul y pone de vuelta y media a otro de la bancada roja. Sus compañeros de partido le aplauden cual si fuese Plácido Domingo después de un sostenido do de pecho.

         Se levanta airado otro congresista del bando contrario y contradice al orador con argumentos que son ovacionados por los de su equipo.

         Todos son señores bien vestidos, bien alimentados y bien transportados que seguramente tras la demagógica representación se irán a un cinco tenedores a comer juntos.

         Mientras, la vieja dama, España, yace sola y desnutrida en la cama de un asilo porque las de la Seguridad Social están “acolapsadas”.

.

TODO SOBRE MI MADRE

  

                   La madre a la que me refiero se llamaba Francisca Caballero y fue la progenitora de mi admirado y archifamoso triunfador Pedro Almodóvar. ¡Cuánto le hubiera gustado, aunque en este sentido se fue al otro mundo bien servida, ver la atronadora y prolongada ovación que recibió su vástago, hace unos días, durante la ceremonia de entrega de los Premios Goya.?. ¿No fue algo desmedida?... pero este es otro asunto

                   ¿Y a qué viene todo esto?. A que situaciones como esta nos obliga a triunfar para que nuestros afectos no sólo disculpen nuestros defectos, (y no me refiero a la homosexualidad como tal), sino también nuestra forma distinta de vivir y pensar.

                   Recuerdo como mi padre me hablaba de la tristeza de un íntimo amigo porque un hijo le había salido…¡comunista!. Era el inicio de la transición. El niño, que ya está calvo y obeso, ocupa desde hace tiempo puestos de alta responsabilidad política que le procuran unos buenos dividendos, coche oficial y un sinfín de agradadores.

                   El padre pudo vivir el inicio de tan brillante carrera y ya no lloraba sobre la camisa azul; por el contrario se sentía muy orgulloso de su vástago.

                   La madre de Almodóvar también cambió sus lágrimas de dolor, cuando le decían de la vida liberal de su vástago en el Madrid de los ochenta, por las de orgullo y alegría al verlo triunfador de su auténtica vocación: el cine.

                   ¡Señores…hay que triunfar para que los que nos califican de distintos hagan el paripé de parecerse a nosotros!

.

MARICHALAR A LOS CORRALES

 

         Y juro que el título lo escribo sin el menor atisbo de maldad o doble intención. Algo, además, obvio vista la real figura de su ex-esposa, también sin retintín.

         Estaba yo tan a gusto viendo el telediario a la espera de los deportes y el informe meteorológico cuando veo de pronto, cómo unos operarios, al hilo de una voz en “off” a la que no le pude hacer caso por el impacto de las imágenes, cogen al Duque de Lugo de detrás de un burladero, lo colocan en una carretilla, lo meten en un ascensor, tieso e inerte, (¡que impresión!), de donde lo sacan para depositarlo en un sótano.

         Como no había oído el relato leo al día siguiente que Don Rafael Marichalar, al haberse divorciado de la Infanta Elena, ha perdido su título de Duque, su Grandeza de España, sus puestos de trabajo y, por supuesto, su lugar en el protocolo real. ¡Coño… al puto paro!. ¡Qué duro!.

         Pero así es la vida y el hecho no merece mayor comentario. Lo que me ha impactado han sido las imágenes descritas que, según leí como he dicho, corresponden a una orden por la que también lo eliminan de figurante en el Museo de cera de los famosos.

         Esto lo veo un poco más duro porque, para más INRI, en dicho Museo primero estaba con la familia real, luego lo pusieron con los taurinos y al final, esto tiene guasa, lo han mandado a los corrales.

         Vaya usted de Victorino y Luchino para rematar de Miura en un sótano cochino.

.

                        

MONGOLES Y MONGÓLICOS

 

                   Un individuo hace una película sobre el Dalai Lama y la estrena en el Tibet. El argumento es impactante y de lo más guay. Para que la gente no pierda ni un segundo de interés, antes de los títulos de crédito, aparece en pantalla este provecto sacerdote sodomizando un ornitorrinco y de ahí en adelante, para no bajar ni por un momento la tensión de la cinta, ya podemos imaginar el argumento.

                   Si esto ocurriera, al director como mínimo, le darían una patada de kung-fú  en el culo y lo mandarían más allá de las fronteras mongólicas.

                   Pero no sólo hay mongólicos en Mongolia, y que nadie malinterprete patológicamente esta palabra, también los hay aquí. Un individuo monta una exposición fotográfica en…¡la Universidad de Granada!, cuyo hilo argumental es el siguiente: la Virgen María está, como prostituta, haciendo la carrera por una vía oscura cuando conoce a José y de las relaciones entre ambos, (lo de si fueron de pago no consta aunque se supone) nace Jesús que ya desde chico apuntaba un ligero mariconeo, porque sus relaciones sexuales con María Magdalena no le satisfacen mucho. Ya adolescente descubre que es gay. ¿Sigo…?

                   He leído que la exposición la han clausurado precozmente porque el Rector,  ¡sorprendido por la intolerancia del pueblo granadino!, lo ha decidido así.

                   Los rectores de Universidad de Mongolia, ¿serán mongólicos o tan sólo mongoles?. Me imagino esto último por el bien de la humanidad.

.

PERDIMOS LA FE

 

         Lo cuento tal cual por su actualidad. Voy por la calle y me sale al paso un hombre de mediana edad con un peto amarillo que pone: “Haití”. Me insta a que deposite un donativo en la lata-hucha que porta en la mano cuya etiqueta luce el mismo nombre de la isla atormentada.

         Pienso en décimas de segundo: Mi parvo donativo, ¿hasta dónde y en qué proporción llegará a los pobres haitianos?. ¿Tendré muy mala leche si pienso que el individuo del peto puede, al final de la jornada, sacar el abrelatas del cajón de la cocina y quedarse con la “yesca” incluso convencido que él está más afectado por el paro que la negrita sedienta y coja de la isla caribeña?

         ¿Por qué hay tantas ONGs haciendo lo mismo?. ¿Por qué no se refunden en una sola y así nuestros donativos no se dispersan, se concentran y eliminamos gastos comunes como revistas, campañas de publicidad, comerciales, directivos  y demás?

         Porque si lo hiciéramos eliminaríamos muchos puestos de trabajo y muchos cargos de ilustre representación (remunerados o no) y la cosa está muy mala hijo mío. (dixit Chiquito)

         ¿Pepes y Josés sin Fronteras?. ¿Tonis y Antonios sin Fronteras?. ¿No son los mismos?.

         De los pocos euros que introduje en la lata, dejando atrás el mal pensamiento ¿Cuánto le llega al haitiano que lleva días sentado en una piedra esperando el santo advenimiento?

.

MIL Y POLLAS

 

        

      

          Desde hace unos días vengo leyendo en la prensa sevillana referencias y entrevistas, siempre elogiosas, al autor de una guía titulada: “123 motivos para no viajar a Sevilla”. Por lo que dicen sus exégetas se trata de un recetario de primeros auxilios prácticos destinados a turistas acarajotados. Parece que escribe, con razón, de cómo les vendemos el falso flamenco, el mal denominado “pescaito frito” que, según el autor, en la mayoría de los comederos hispalenses son fritangas insufribles y otros falsos estereotipos.

         Este autor lleva bien encaminada su carrera. Un ilustre escritor abecedista comenzó su carrera literaria con una novela que llevaba el escueto y atractivo título de “Coños” y amén de sus valores literarios, que yo admiro, el tío se ha hecho un carrerón periodístico y católico a partir de un taco.

         Otro escribidor, calificado ya como maestro, inició el magisterio literario con un libro, este sí que no he tenido ocasión de leerlo, titulado “Tontos de capirote” en el que, por lo mucho que he leído sobre él, pone de chupa dómine a los capillitas, ¿he dicho algo?, de Sevilla.

         Conclusión breve. Hay que jugársela. Escribir un libro (y que te lo publiquen, claro) que se titule, por ejemplo: “Me voy a cagar en todos los muertos de ustedes”.

         Si no te matan, te sacarán a hombros como a los sugeridos autores.

.

SER GRACIOSO O CAER EN GRACIA

 

             Fernando Savater, en un artículo publicado en “El País”, recrimina que la jueza Ángela Murillo haya hablado coloquialmente sobre el etarra Otegui, diciendo, entre otras llanezas: “Por mí como si se harta de vino”.

En otro orden, pero dentro del ámbito judicial, mi admirado juez Emilio Calatayud tiene, éxitosamente, invadido Internet con sus charlas, artículos y opiniones.

Amén de su valía profesional, esta invasión mediática, le debe mucho, al tono coloquial que emplea, similar  al usado por su compañera Ángela y recriminado no sólo por el filósofo vasco.

         En el ámbito periodístico al humorista Manu Sánchez, que tiene su gracia y, aun sevillano, es un chirigotero de mucho cuidado, lo ponen a parir en diversas críticas de TV que he leído, por vulgar, soez y demasiado “divulgativo”.

 Sin embargo algún que otro periodista, supongamos que hablamos, de Sánchez Dragó, si dice de alguien que se vaya al carajo se le aplaude y se le ríe la gracia. Y tanto el citado articulista, como en el que piensan ustedes también, escriben en medios que no se caracterizan por su progresismo.

¿Y “Los Morancos”?

         Volvamos al refranero: no es lo mismo ser gracioso, aunque de verdad se sea, que caer en gracia aunque a algunos el malage le salga por los poros.

         ¡La vida…!

.

COMUNISMO

 

             No soy comunista, ni socialista, ni anarquista, ni del tío de la lista. Sólo bético y artista. “Con esto tengo bastante”, que diría el poema de Benítez Carrasco.

 Hace unos días recibí un correo en el que se hacía un símil, muy ocurrente, con el fin de denigrar el comunismo. Decía que esta filosofía política (no sé si esta definición, en mi incultura, es correcta) era un fracaso.

Ponía, más o menos, este ejemplo: si prorrateas las  notas de todos los alumnos de un curso y calificas con la media a cada uno de sus componentes, los malos estarán contentos y los buenos no.

            Y seguía. De esta forma durante el próximo curso los buenos estudiantes se tumbarían a la bartola y los perezosos o torpes esperarían de nuevo el santo advenimiento, con lo que la media de la clase seguiría bajando hasta llegar a cero.

            El símil tiene truco. No suele existir un estudiante malo de todo sino uno deficiente en, valga el ejemplo,  física y otro sobresaliente en literatura. Si se saca la media de los dos, el reparto es justo.

            Si Dieter Grundig hace un televisor, Stephen King escribe “Misery”. Ambos se regalan sus obras y quedan en paz. Como verán, si han llegado hasta el final de estas letras, no quería hablar de política, algo detestable, sino de otra cosa más vital y preciosa: de vocación.

.

EL TERCER HOMBRE

 

 

         Y no hablaré de Graham Green ni de Orson Wells que tan perfectamente interpretó su obra. Hablaré de la dura convivencia.

         La vida es un permanente diálogo de sordos. Lo dice un amante del diálogo. ¿Es posible el diálogo profundo y aclaratorio sobre un tema?. Desgraciadamente no, porque somos por naturaleza egoístas.

Nunca un acusado reconocerá su delito. El interlocutor que le recrimina una mala acción para con él, estará perdiendo el tiempo porque el interpelado no escucha; está tan sólo pensando en lo que va a contestar.

         Nuestra más cercana referencia es el propio YO. Lamento por tanto la cada vez más frecuente ruptura de relaciones por malos entendidos entre ex amigos y la propia familia.

 Sólo un tercer hombre, (¡uy!, perdón, o mujer), puede ser el buen samaritano que, si se ofrece, haga de interlocutor y deshacedor de entuertos entre las partes enfrentadas. Esta persona puede hacer que ambos antagonistas estén más receptivos y menos egocéntricos.

         Pero, ¿dónde mora esta persona?. ¿Existe?. No. La mató el refranero: “Ni fías ni porfías”. “Cada cual en su casa y Dios en la de todos”. “Cada mochuelo en su olivo”. “Saldrás con los pies fríos y la cabeza caliente”. Y por supuesto la cobardía.

         Que hijoputa este refranero…¿español?

.

¿SEMEJANTES?

 

            Detesto que se me diga semejante de alguien de mi prójimo, cuando a lo máximo que llego con  mi comparado es a ser de la misma especie. Yo no tengo ningún parecido con el recién ejecutado iraní Alí Hasán Al Jamid, apodado “El químico” y primo de Sadam Hussein. Dicen que le llamaban así por regar de gas sarín  un sinfín de poblaciones. Operación con la liquidó a cientos de miles de seres humanos.

            Era bípedo y tenía , visión, oído y habla. ¿Por eso era mi semejante?. ¡Anda y que le den!. Por ello, lo de semejante hace tan difícil la clasificación de cualquier humano.

.

Hay algo tan actual como el baremo que nos obliga a clasificar personas intentando tabular con puntos sus méritos.

            Yo, por ejemplo, soy farmacéutico y, como yo, treinta y nueve mil ochocientos veintisiete más. ¿Mis méritos?. Pocos. Si acaso, a fuer de objetivo, los que constan en los títulos académicos.

            Los demás son totalmente sujetivos. ¿Son semejantes dos farmacéuticos instalados con farmacia en una capital?. No. Depende de ésta y de la ubicación de sus boticas. ¿Y lo son dos BOTICARIOS RURALES, uno solo en un municipio de dos mil habitantes limítrofe a una gran urbe y otro a muchos kilómetros de la capital con ochocientos?.

            ¿Semejantes?. Si acaso en lo de “Licenciado en Farmacia” que pone el cuadrito colgado del despacho.

.

DARWIN

 

 

         Llevaba rato el hombre sintiéndose observado, de una forma impertinente, por otra persona. Evidentemente molesto le dice:

                   -¿Qué mira?. ¿Es que tengo monos en la cara?

              -No. Monos no. Tiene mono.

         ¿Provenimos de los monos?. No lo sé. Puede que sí o puede que no. De lo que estoy seguro es que vamos hacia ellos de una forma galopante. Y no lo digo por la fealdad mayoritaria del prójimo, como contempla el chiste inicial, que también, sino por la cantidad de imbéciles no pensantes a los que nos enfrentamos diariamente.

         Internet está poniendo bastante de su parte, porque la parte positiva del mono, que es la social, nos la está encapsulando en el binomio ratón-pantalla.

         Por la máquina me reenvían cosas preciosas. Paisajes idílicos. Lugares, en principio inaccesibles, que son un canto a los viajes y la aventura. Incluso la pantalla te sugiere, con una aparente inocencia, la dirección de una web en la que entrando te facilitan datos, billetes y posibles estancias.

         Yo detesto viajar. Me aburren los paisajes, bostezo en las catedrales, me aburren las vistas que te ofrece un autobús en marcha. Soy un mono inculto.

         El mejor paisaje que conozco y la mayor aventura que añoro es  la mirada de una mujer a la que quiero.

.

 

CONCIENCIA TRANQUILA

 

 

         Cuando, rara vez, veo en el telediario una tragedia que escapa de mis manos: léase atentados masivos, seísmos, tsunamis etc…procuro cambiar de canal, ante mi impotencia de aportar algo. Y, aun con este sistema, si durante el día no se me ha atravesado otra adversidad imputable a mí, sigo durmiendo mal.

         Pero estén tranquilos, los que me quieren, porque lo he resuelto con somníferos. Hay quien, a pesar de lo escrito, dice que duerme a pierna suelta porque tiene la conciencia tranquila. Será porque se acuestan sabiendo que han apagado el gas.

         Esto, al menos, es lo que alegan los limpios de conciencia que comienzan a roncar con tan sólo tocar el pijama. En este grupo entran todos los políticos; eso sí, algunos más que otros.

         ¿Puede dormir sin hipnóticos el Director General de Prisiones sabiendo, como lo sabemos todos, y aceptándolo o inhibiéndose, que las cárceles son sedes de actividades consentidas como tráfico de alcohol, estupefacientes, clanes y violaciones?

         ¿Y los simples votantes que pasan diariamente por la puerta de esas otras cárceles que son los puticlubs de carreteras?.

         No todo es Somalía, Afganistán o ahora..¡que horror!, Haití.

         ¡Vamos a la cama que hay que descansar….!

.

MALA INVERSIÓN

 

 

 

                                  -Doctor, estoy perdiendo la memoria

                   -¿Desde cuándo…?

                   -Desde cuándo…¿qué?

         La crisis, llamada coloquialmente, del ladrillo tiene de los nervios a los hormiguitas, esos que invitan en su casa a endivias con roquefort y no a langostinos de trasmallo, con cuyo ahorro, a costa del “invitado” y tacita a tacita, compran apartamentitos y segundas viviendas para dar su pelotazo particular.

 

         Ahora, en este sector, como diría Chiquito de la Calzada: “la cosa está muy mala, hijo mío”; pero, no obstante, vendrán los brotes verdes y estos envidiables y ponderados inversores, eliminando incluso las endivias, aguantarán y harán su repensada operación de plusvalía.

 

         Los que han dedicado su vida a la cultura humanística, sin plaza fija, y han ido tan sólo acumulando un patrimonio memorístico que se volatiliza tras su transmisión, lo tienen crudo en su futuro.

         La crisis, insoslayable e irreversible, que es la vejez tiene como una de sus principales patologías la pérdida de la memoria y ésta no vuelve más, ni aún eliminando las endivias.

         ¡Qué pena, para algunos, no haberlo sabido antes!

         -¿El qué…?

 

        

MONA LISA TIENE ALTO EL COLESTEROL

 

 

         Esto no lo digo yo, lo afirma un médico italiano llamado Vito Franco, al que no conozco, que tiene un buen ojo clínico…¡vaya si lo tiene!.

         Ha hecho el diagnóstico observando, me imagino que durante mucho tiempo, el retrato de la Gioconda. Dice que le ha bastado con observar, ¡eso sí!, detenidamente, los abultamientos que la enigmática dama tiene alrededor de las cejas para asegurar su alta tasa de colesterina.

         El tío no se ha quedado aquí sino que afirma, a su vez, que “El Cupido” de Caravaggio posee unas manos tan afeminadas que revelan que sufre aracnodactilia, patología ligada al síndrome de Marfan.

         Y sigue, como el conejito coñazo del tambor, diciendo que la infanta Margarita de “Las Meninas” padecía síndrome de Albright, un mal genético.

         Este insigne doctor, más que una consulta, debe tener una pinacoteca, además de muy pocos pacientes reales ya que en sus largos ocios reconoce cuadros. Yo, que llevo así algún tiempo en mi trabajo, he seguido su ejemplo y observando un almanaque que tengo en mi mesa con la reproducción de “Las Meninas”, he diagnosticado a la bajita que está a la izquierda de la infanta, tras el perro, por su mixedema hipofisiario, como enana.

 

 

EQUILIBRIO

 

 

                   Yo de mayor hago reflexiones y de joven hacía flexiones. La mezcla de ambas actitudes es buena para la conquista de la mujer deseada. Se empieza con la magnesia del verbo y se termina con la gimnasia del sexo.

                   Cuando el equilibrio se desestabiliza, y prima más el verbo que la acción, la conquistada se suele aburrir porque confunde, a quien yace junto a ella, con un transistor, aparato más fácil de adquirir que un maromo.

                   Por ello el equilibrio es la perfección. Los bárbaros del norte desprecian la displicencia de los sureños. Los que asumimos con el poeta  lo de:  “mi voluntad se ha muerto una noche de luna en que era muy bonito no pensar ni querer. Mi ideal es tumbarme, sin ilusión ninguna; de cuando en cuando un beso y un nombre de mujer”, nos sentimos culpables de no saber hacer tornillos.

                   Nosotros tenemos sol, buena temperatura, relajantes paisajes y el excelente humor que da el sol. Busquemos, pues, el equilibrio.

 ¿Por qué no se traen ellos su tecnología e incluso su agua, aunque sea embotellada, y nosotros les hacemos de guías, camareros, cocineros y, en definitiva, de anfitriones?. ¿O es que, quizás, esto no es un trabajo?

                   Flexiones por reflexiones. ¡Equilibrio!…. Pero sigue lloviendo.

.

TAXONOMÍA

 

 

              Existen incontables clasificaciones de seres vivos, pero la fundamental, para mí, es la que los encuadra en: listos-listos, listos-tontos, tontos-listos y tontos-tontos.Los primeros son tan escasos que, desde hace infinidad de años, un grupo de antropólogos está tras sus huellas sin éxito. Los últimos son especie mayoritaria.

            Hay taxonomistas que los clasifica, también, como votantes convencidos.Entre los intermedios están los segundos, los listos-tontos, llamados también fracasados naturales. Los últimos estudios psicológicos explican esta tara por la obsesión de preguntarse constantemente lo que no deben hacer; movidos por el pudor, la bondad o el temor. De esta forma terminan sin conseguir nada.

          Y están los terceros, los tontos-listos que obtienen todo. Sólo piensan lo que quieren conseguir. Hay, entre estos, dos subtipos: Los malvados que no miran atrás para no contemplar los cráneos que han pisado y los menos malvados que son como mister Magoo. Están representados por los que se cuelan primero por las cajas de los supermercados, aunque la cola sea kilométrica.

.